16.8.09

(sin título) 

Cuatro paredes de cemento 
sostienen el peso de tu historia. 
La aguja herrumbrada, 
carcomida por la rutina, 
besa el acetato 
y me respira alientos de última canción.

Sos memoria de textura áspera 
de sonidos lejanos, 
complejos de descifrar. 
Quiero poder escuchar tu caos, 
la definición de lo nuestro, 

alguna orquesta vieja que interprete tanta despedida.


10.8.09

bazar 

una cabeza empolvada en cada esquina 
entre brazos pesados y el alcohol de siempre. 
aquí el porvenir nunca lo anunció 
el carro con parlantes 
ni se dejó ver al final del año 
desfilando junto a las mismas muchachas delgadas. 

la angustia se cuela por debajo de las puertas 
y se amontona de a poco. 
techos herrumbrados 
luces débiles 
treintas de mes

en este lugar todos cargamos un recién nacido 
para que nos compren algo de lo que ofrecemos.