25.4.11

por la tarde compartí mi arroz integral con las palomas, pero se les pegaba a los picos sin poder tragar. este momento quién lo inventa. empezó a llover como llueve en esta ciudad y las palomas seguían picoteando y peleándose, el arroz volviéndose imposible, la gente corriendo sorprendida por el agua, el sonar de la ciudad, qué hago tan lejos, cada vez más palomas, cada vez más mojado el arroz, se quedó vacío el parque, solamente las palomas, el arroz y yo. yo ahí pero lejos, las palomas locas por nada.